Una habilidad muy importante que tenemos que desarrollar para tener interacciones efectivas es saber dar el siguiente paso ¿A qué me refiero con esto?
Pues a la capacidad de lanzarte a una situación, por ejemplo abordar a una chica desconocida, y luego en medio de la interacción ser capaz de intuir cuál es siguiente paso que tienes que dar para que la interacción se mantenga viva.
Por eso es muy importante desapegarse de métodos rígidos que establezcan pautas de las cosas que tenemos que hacer o decir durante nuestras interacciones. Está bien tener un fin en mente y salir con la idea de practicar alguna habilidad en específico, pero nunca podemos apegarnos a una sola forma de hacer las cosas porque sino nunca vamos a desarrollar la habilidad de intuir cual es el siguiente paso durante las interacciones.
Cada interacción es única y en cada una de ellas los pasos que tienes que dar para que se mantenga viva son diferentes. A veces estás bailando con una mujer y es necesario que la lleves a sentarse contigo para hablar. Por el contrario, a veces lo que necesitas es seguir bailando con ella y seguir disfrutando ese momento.
La experiencia es la que nos desarrolla esta capacidad de intuir el siguiente paso, pero si no tenemos la mentalidad correcta es muy difícil pulir esta habilidad ya que siempre vamos a tener una forma rígida de hacer las cosas y siempre vamos a recibir las mismas reacciones.
La mentalidad es sencilla: actúa sin tener una forma establecida de hacer las cosas y luego mantente atento para descifrar en medio de la interacción cuál es siguiente paso que tienes que dar para mantener viva la interacción.
Comparte este artículo