Siempre vas a tener salidas buenas y salidas malas, hay veces que todo te va a salir bien y sin esfuerzo, todo lo que hagas va a funcionar, el local va a estar lleno de mujeres a las cuales abordar, etc.
Por otro lado, hay veces que todo parece gris, no hay muchas mujeres a las cuales abordar, te sientes inhibido, dejas pasar oportunidades, todo pareciera estar en tu contra, todo sale mal.
Si te mantienes saliendo constantemente vas a notar que esto es algo que siempre pasa, a veces las cosas salen bien y a veces muy mal. Estos altos y bajos son parte del proceso de aprendizaje que uno tiene que experimentar para mejorar sus habilidades y fortalecer el carácter.
Es muy fácil apegarse solamente a las salidas buenas, uno siempre busca pasarla bien y aprovechar al máximo la noche; cuando las cosas empiezan a salir mal uno empieza a crear resistencia, al ver que las cosas no están saliendo como queremos entonces empezamos a crear tensión dentro de nosotros. Pensamientos inconscientes como “quiero que las cosas salgan igual que ayer que la pase excelente” o “no quiero sentirme así, quiero que las cosas empiecen a salir bien” empiezan a surgir dentro de nosotros.
Al crear resistencia todo empieza a salir peor. Si entiendes que las noches malas son parte de tu aprendizaje vas a entrar en un estado de aceptación y vas a eliminar todo tipo de resistencia dentro de ti. Cuando esto pasa siempre terminas teniendo resultados y experiencias increíbles en esas “malas noches”.
Lo que hace que una salida sea mala es sencillamente crear resistencia interna ya que las cosas no están saliendo como esperábamos. Si te mantienes consciente de esto y sencillamente aceptas todo lo que está pasando en ese momento, entonces vas a poder aprovechar cualquier oportunidad que se te presente y vas a terminar teniendo experiencias y aprendiendo cosas que solo puedes aprender en esas noches “malas”.
Comparte este artículo